Conocer para prevenir
La Fundación Fucac invita a la charla “El ACV se puede prevenir” a desarrollarse el sábado 9 de diciembre de 2017 a partir de las 10:30 en el Auditorio del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de Santa Fe (CPCE), Cámara I, en calle San Lorenzo 1849 de la ciudad de Santa Fe. La disertación contará con la presencia del Dr. Sebastián F. Ameriso, médico Neurólogo, jefe de la Sección de Neurología Vascular de Fleni de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La entrada es libre y gratuita, abierta a toda la comunidad santafesina.
Cerca de la mitad de las personas que sufren un ACV y sobrevive no puede reincorporarse a su actividad anterior y buena parte no puede desempeñarse en la vida cotidiana sin ayuda de otras personas; 2 de cada 3 pacientes mueren antes de los 2 años de producido el accidente.
Se lo conoce con distintos nombres: ictus, isquemia, derrame cerebral, ataque cerebral, stroke; el Accidente Cerebro Vascular (ACV) es la primera causa de discapacidad en el mundo y la segunda causa de muerte. Enfermedades como la hipertensión y la obesidad, pero también los malos hábitos alimentarios, el tabaquismo, el consumo excesivo de alcohol, o la falta de ejercicio pueden ser detonantes.
Bajo el lema “Es importante conocer para poder prevenir”, la Fucac (una organización dedicada a la lucha contra la Enfermedad Vascular Cerebral) invita al público en general a asistir a la charla “El ACV se puede prevenir”, que tiene como expositor central al Dr. Sebastián F. Ameriso, jefe del Centro Integral de Neurología Vascular de la Fundación Fleni.
Conocer para prevenir permite tomar conciencia real acerca de:
- qué sabemos los santafesinos sobre el ACV,
- si reconocemos los síntomas que lo caracterizan,
- si estamos al tanto de la gravedad que representa, y
- nuestra idea sobre las acciones que debemos tomar en caso de sospechar o reconocer su existencia.
Charla “El ACV se puede prevenir”, organizada y auspiciada por Fucac en el CPCE de Santa Fe.
Todas las evaluaciones preexistens indican que la mayoría de las personas tiene alguna noción sobre ACV y la mayor parte de los datos que manejan provienen de los medios de comunicación y de las redes sociales, aunque muy pocos reconocen términos como ictus, isquemia o ataque cerebral; pero además, hay una proporción importante de la población que desconoce por completo la gravedad del cuadro.
Frente a la urgencia y el tratamiento, 1 de cada 4 personas no considera a los síntomas característicos del ACV como un indicio de urgencia, al tiempo que se desconoce la existencia de tratamientos específicos para el accidente que afecta a 1 argentino cada 4 minutos y produce más de 18 mil muertes por año sólo en la República Argentina.
Cerca de la mitad de las personas que sufren un ACV y sobrevive no puede reincorporarse a su actividad anterior y buena parte no puede desempeñarse en la vida cotidiana sin ayuda de otras personas; 2 de cada 3 pacientes mueren antes de los 2 años de producido el accidente.
Todas estas razones llevan a la Fucac a insistir en la difusión –por todos los medios a su alcance– de del máximo de información sobre esta peligrosa enfermedad.
ACV y prevención
Un accidente cerebrovascular (ACV) isquémico se produce cuando parte del tejido neuronal deja de recibir irrigación sanguínea y se daña, cuadro desencadenado por lo que se conoce como trombosis, obstrucción de una o más arterias por coágulos que las taponan.
El Accidente Cerebro Vascular es una vasculopatía cerebral (Enfermedad Vascular Cerebral o EVC) considerada como emergencia médica severa que compromete al tejido neuronal, ya porque se produce un sangrado que provoca un edema en el espacio subarcnoideo del interior del cráneo y afecta al tejido cerebral (ictus hemorrágico), ya porque tiene lugar una disminución brusca del flujo de sangre hacia el cerebro (ictus isquémico) por infarto lacunar, embolias de origen cardíaco o infartos dependientes de las carótidas.
Moderar los factores de riesgo, conocer los síntomas y tratar al paciente a tiempo pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte, y ayudar a evitar secuelas graves; evitar fumar o que se fume, controlar el colesterol, mantener la hipertensión arterial en valores normales y prevenir o controlar la diabetes a través de la alimentación y los medicamentos apropiados, son acciones que ayudan a evitar la ocurrencia de un ACV o reducir drásticamente sus consecuencias.
Según datos del Instituto de Neurociencia de Buenos Aires (Ineba):
- La hipertensión arterial multiplica por 4 el riesgo de sufrir un accidente de este tipo.
- El hábito de fumar puede triplicar las posibilidades de un episodio cerebrovascular.
- Consumir entre 3 y 5 porciones diarias entre frutas y verduras reduce en un 11% el peligro de padecer un ACV.
- Hacer actividad física frecuente disminuye entre un 25 y un 30% el riesgo, ya sean
- 150 minutos (2 horas y media) por semana de ejercicio moderado o
- 75 minutos (1 hora y cuarto) de actividad intensa.
Los ACV vinculados a una arritmia cardíaca frecuente se presentan de manera cada vez más habitual en los mayores. Además, la amenaza para la salud que supone la fibrilación auricular (el tipo de arritmia más común, que aumenta 5 veces el riesgo de sufrir un ACV) está en aumento según todas las estadísticas.
A más edad, más riesgo de padecer una fibrilación auricular; por encima de los 80 años, el 20% de las personas sufre esta clase de disfunción eléctrica del corazón, y esto incrementa el riesgo de ACV.
Los ACV causados por la fibrilación auricular suelen ser más graves y causar daño neurológico más severo. “Es una epidemia que se viene, porque las personas viven cada vez más años”, afirma el invitado especial de la Fucac, el Dr. Sebastián Ameriso. “Todo el mundo sabe que el cigarrillo y el colesterol alto son malos, pero no existe conocimiento en la población sobre el riesgo que representan las arritmias”, asegura el especialista de Fleni.
“Al contraerse el corazón en forma irregular, se produce el estancamiento de la sangre en el interior de la aurícula y se coagula. Ese coágulo queda pegado a la pared interna de la aurícula, pero cualquier contracción puede despegar el coágulo, que va por las arterias al cerebro, causando un embolismo”, lo que deriva en un ACV isquémico.
Fleni: a la vanguardia de la neurociencia
Fleni: Fundación para la Lucha contra las Enfermedades Neurológicas de la Infancia.
La Fundación para la Lucha contra las Enfermedades Neurológicas de la Infancia (Fleni) es una organización sin fines de lucro creada en 1959 por el Dr. Raúl Carrea, Jefe de la Sala 18 del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, junto a un grupo de benefactores, con el objetivo de contribuir a la prevención y la lucha contra las enfermedades neurológicas de la infancia.
A lo largo de 65 años, y gracias a la ayuda incondicional de sus benefactores, Fleni –una verdadera marca registrada en servicios ligados a la salud– ha evolucionado hacia una prestación integral en patologías neurológicas que incluye la prevención, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación, lo que la convierte en una institución médica de prestigio internacional que atiende a niños y adultos en todo lo relacionado con las neurociencias.
Además de proporcionar atención médica, Fleni impulsa proyectos de investigación, educa a la comunidad en prevención, desarrolla programas asistenciales y alienta el trabajo conjunto con otras instituciones científicas universitarias, tanto nacionales como del exterior, en el área de educación médica.
Un centro de las características de Fleni sólo es posible cuando una comunidad de mecenas y donantes –benefactores– trabaja activamente, cuando se logra el compromiso de las organizaciones y de la gente, y cuando los ingresos se reinvierten en su totalidad.
Dr. Sebastián F. Ameriso
Dr. Sebastián F. Ameriso
El Dr. Sebastián F. Ameriso se graduó con Diploma de Honor y primer promedio en la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Rosario en 1983.
Realizó residencia de Neurología en el Hospital Ramos Mejía de Buenos Aires, donde egresó en 1988, para realizar un fellowship en Enfermedades Cerebrovasculares en el Departamento de Neurología de la Universidad del Sur de California en Los Angeles, EE.UU. En 1992 fue nombrado Assistant Professor (tenured) en dicha institución.
Desde 1996 es jefe de la Sección de Neurología Vascular de Fleni. En la actualidad tiene a su cargo el Centro Integral de Neurología Vascular y la Unidad Cerebrovascular de la institución.
El Dr. Ameriso fue el primer Profesor a cargo y el primer Jefe de servicio de la Universidad y el Hospital Universitario Austral.
Es fellow de la American Heart Association y de la American Acvademy of Neurology, y miembro titular de la Sociedad Neurológica Argentina y de su Grupo de Neurología Vascular.
Ha presentado más de 200 trabajos en congresos científicos y publicado más de 60 estudios científicos en revistas con referato, y contribuido capítulos en más de 10 libros de la especialidad.
Ha recibido numerosas distinciones, entre otras de la American Heart Association, Los Angeles County-USC Health Research Association, Wright Foundation, Zumberge Research and Innovation Fund, Sociedad Argentina de Ecografía y Ultrasonografía, Asociación Médica Argentina, American Stroke Association, Academia Nacional de Medicina de Buenos Aires.
Participa como conferencista en diversos congresos nacionales e internacionales.
Es miembro del comité editorial y revisor en numerosas revistas nacionales e internacionales de la especialidad.
Fue Presidente de la Sociedad Iberoamericana de Enfermedad Cerebrovascular.
Ha sido Investigador Principal, Coordinador Nacional y miembro del Steering Committee de numerosos ensayos clínicos de prevención y tratamiento de la enfermedad cerebrovascular.
Recientemente ha obtenido un subsidio del Ministerio de Ciencia y Tecnología para el primer estudio argentino que evaluará la seguridad y eficacia de las células madre en pacientes con ACV agudo.
